Entender el metaverso, más allá de la realidad virtual

¿ Qué es el metaverso?

Entender el metaverso puede ser complicado y algo de otra galaxia de inicio, pero como cualquier lugar, debes visitarlo para entenderlo, para hacerte una opinión sobre el mismo.

El metaverso, en su definición más ajustada, vendría a ser el metauniverso (acrónimo de meta, ‘más allá’ y ‘universo’) un concepto que denota la siguiente generación de internet. El metaverso describe una experiencia inmersiva y multisensorial en el uso aplicado de diversos dispositivos y desarrollos tecnológicos en internet. Quizás dentro de este ecosistema algunas de las tecnologías más destacables estarán relacionadas con la Realidad Virtual, VR en sus siglas en inglés (virtual reality).

Es cierto que el principal motor del metaverso hasta ahora han sido los videojuegos. Sin embargo hay cada vez más casos e industrias donde lo iremos encontrando. Puedes ver una pildora formativa sobre el Metaverso AQUI

¿Quieres hacer un recorrido virtual por el metaverso?

Más que virtual es ya muy real y tenemos casos de metaverso como Uttopion por ejemplo. Uttopion es el primer metaverso español que inició su etapa de comercialización. La compañía puso en marcha sus primeros terrenos, en modo preventa. En la etapa de venta exclusiva se venden a un precio también exclusivo, que pasada la duración de la promoción de preventa variarán al alza seguro.

¿Cuál es el lead magnet como metaverso de Uttopion? Pues el lead magnet, gancho o imán, en este caso, son los avatares que tienen dentro de su metaverso. Esto lo han conseguido utilizado sus propias viviendas y locales virtuales. Con estos, tratan de atraer a los potenciales clientes invitándoles a probar sus avatares bajo esas condiciones excepcionalmente privilegiadas por el modelo de preventa.

Por ejemplo, ellos cuentan con espacios muy diferenciados dentro del mismo metaverso. Musichood por una parte, es un espacio creado para dar cabida a eventos y negocios relacionados con el sector de la música. Por otro lado Sportsvilla, que está especializado en deporte.

Su misión en términos de uno de sus fundadores es crear un entorno virtual increíble para ayudar a uttopians (usuarios), metastreamers (creadores de contenido) y a marcas a conectar con su comunidad en un espacio virtual que se adquiere como NFT (non fungible token o tokes no fungibles) y puede ser totalmente personalizable.

Son un metaverso híbrido que garantiza la propiedad de los propietarios a través de tecnología blockchain. Si quieres profundizar tu conocimiento en esta tecnología, desde un punto de vista de negocio, hablo habitualmente sobre usos y beneficios de la tecnología blockchain, tambien para PYMES en las Cámaras de Comercio. Todo lo que es la tecnología blockchain para un público no tecnológico, donde identificar las características y beneficios que hacen única a la tecnología blockchain. Y sobre todo entender qué se puede hacer con blockchain y qué no.

¿Cómo funciona la magia de la tecnología en este caso?

Pues en este caso vemos que con la conjunción de varias tecnologías, los usuarios pueden construir una réplica virtual de su negocio o concepto y vender productos. Productos digitales, también productos reales, realizar un evento virtual con venta de entradas, etc.

En el metaverso, las posibilidades de crear experiencias únicas e infinitas para su público objetivo son interminables.

Hay otras plataformas como Sandbox, Decentraland o SuperWorld donde puedes comprar propiedades inmobiliarias en forma de NFTs. E incluso tienes marketplaces, como Kiosuku.shop donde puedes encontrar coleccionables en forma de «croms NFT» con los que adquirir una vivienda, solicitándola canjear al terminar la colección. O acceder a subastas que nos conectan con el mundo real con premios que son inmutables y exentos de cualquier tipos de fraude.

Y es que a los tokens no Fungibles o NFT`s las utilidades abren un mundo casi inimaginable de oportunidades. Son los primeros elementos en este sentido con los que se construyen los metaversos. Sin los mismos, los metaversos podrían ser «discotecas vacías».

¿Y cuál es el elemento común visto hasta el momento con cualquier metaverso?

El elemento común es que el metaverso viene a ser una representación del mundo real. Los suelos, locales o inmuebles tienen un uso determinado y también una licencia acorde a la actividad. Y dentro de estos espacios, como ya vino siendo con las redes sociales, se produce una elongación del individuo.

Este es posiblemente el elemento más poderoso, permite al usuario estar en el lugar que le gustaría y hacer lo que más desea, sin un gran número de restricciones que en la vida real tendría o se autoimpondría. Por este motivo vemos que en las redes sociales las personas somos capaces de hacerlo que quizás en el mundo físico no nos atreveríamos.

¿Te imaginas ahora en un mundo virtual?

Pues Marc Zuzckerberg si lo imaginó y de hecho es el que parece que rescató un concepto como hemos visto no tan nuevo y no precisamente solo por las películas de ciencia ficción.

¿Qué pasa cuando se produce una compra en el metaverso?

Una vez compras en el metaverso, Uttopion por ejemplo opta por otorgar al propietario un trozo de Terra, que es un NFT ERC-721, con un código único garantizado por un contrato digital inteligente o smart contract. Ahora ya, al ser de su propiedad, puede explotarlo, alquilarlo o venderlo respetando los términos y condiciones de uso.

En el sector inmobiliario es un término cada vez más utilizado, ya que poco a poco se va generando negocio en él. Según publicó CNBC, durante el 2021 la venta de inmuebles en el metaverso alcanzó los 500 millones de dólares. La cifra proviene de un informe elaborado por Meta Metric Solutions.

Aunque no será solo en este sector donde estén las oportunidades del metaverso. Las habrá en sectores como el de la formación y educación, el turismo, el deporte o industrial. Como hemos visto, el blockchain o el de desarrollo de software, entre otros.

Y sin duda muy especialmente en el del ocio o entretenimiento de una forma más amplia, albergarán grandes opciones de negocio.

Para los consumidores, poder acceder a través de dispositivos, hacer trámites por ejemplo, sin la necesidad de estar físicamente haciendo cola es una expectativa extasiante. Imaginemos así, una experiencia digital donde se juntan realidad virtual, video en streaming, redes sociales, criptomonedas… Una realidad paralela sin limitaciones físicas, sin horarios, sin distancias.

¿Cómo pasar mi negocio al metaverso?

Es un proceso, como bien sabes, aunque ni tan costoso ni posiblemente tan traumático como imaginas o como fue hace muchos años tener un proyecto web, sin ir más lejos. Será un cambio muy parecido al que se embarcaron las empresas cuando pasaron de ofrecer sus servicios físicos o trasladar el proceso de venta de productos y servicios al canal online gracias a Internet.
Hay que pensar que además se estandarizarán tecnologías y procesos que permitirán desarrollar y mantener un metauniverso.

A nivel de marketing, las empresas tendrán que cambiar sus estrategias para realizar contenido específico para el metauniverso. Google ads o Facebook ads no serán suficientes y se incluirán nuevos canales. Además, un nuevo nivel de hasta dónde puede llegar la personalización del mensaje, se creará.

Habrá avatares que funcionen por Inteligencia Artificial (sus siglas en einglés IA) y conocerán los gustos de los usuarios. Así, un nuevo nivel de personalización también llega y tanto las criptomonedas como los tokens de activos intangibles, NFT tendrán un papel destacado en el metaverso.

Y los creadores de contenidos tendrán nuevas oportunidades de llegar a nuevas audiencias.

¿Crees que será importante socializar el metaverso?

En mi opinión, más que nunca, porque si solo termina estando en manos de unos pocos…

Dejando aparte el tema de la regulación de los metauniversos, que será imprescindible también otros elementos como la ética tendrán cada día más peso. Haz cuentas, el metaverso permitirá localizar a las personas en él. Hoy esto es un límite prohibido en el mundo real sin ir más lejos.

Resumiendo, el metaverso generará datos de todos y cada uno de nosotros, gracias a la atención que nos produce, se antoja ilimitada, y a más datos, mayor será el conocimiento de las empresas de nuestro comportamiento futuro, y mayores serán las ganancias publicitarias.

Se abrirán sin duda nuevas posibilidades que hasta hace muy poco han sido ciencia ficción.